viernes, abril 27, 2007

EL desquite- parte I

La situacion educativa està cada vez màs critica, la persona que lo niegue vive en una burbuja. Si bien, de manera optimista, se puede decir que esta es la era del hombre en la que se plantea que puede pensar por si mismo, que lejos estamos de tal capacidad. Y que lejos que estamos de comprometernos con nuestros pares, con la sociedad en la que estamos inmersos...y no darnos cuenta que cada cosa que sucede en ella nos afecta... Mucho hay para decir respecto de la adolescencia, de la nueva generacion que el dia de mañana nos van a dirigir o van a ser protagonista del mundo que nos tocara vivir. Primero, que esta generacion está sola en el desarrollo del pensamiento critico, que esta juventud que se asoma poco interes demuestra por el futuro, tal vez porque no lo ven, porque no conocen realidades tangibles basadas en valores relacionados con la solidaridad, el respeto, el trabajo, compromiso.... y que ideas como estas pueden palpar? sino estamos metidos con nuestro egoismo, con opiniones divididas, sin poder vernos ni proyectarmos como adultos. Es triste cuanto tiempo estamos perdiendo...mientras niños y niñas crecen en la marginacion, en la violencia, en el abandono social....que pueden proyectar los jovenes que solo viven el dia a dia efimeramente, que no tienen referentes, donde el consumo es lo que permite identificarse y reconocerse como mejor persona en vez de ser mejor persona por representar valores y actitudes de respeto y solidaridad EStamos disgregados, cada vez más egoista pensamos en que nadie nos toque nuestro bolsillo, que nadie se atreva a entrar a nuestro hogar, mientras compramos alarmas y opinamos sin fundamento, donde la ignorancia y la desinformacion esta al orden del dia... un diagnostico asi nos puede llevar a pensar que no hay solucion. A veces uno se cansa de ver, de escuchar, se cansa de ser impotente. Necesitamos reconocer el problema, que el mundo no debe imponerse, somos responsables y tenemos libertad, lo cual nos diferencia de las maquinas y los animales.

Rawson